Es el más completo y seguro, ya que presenta varios mecanismos que dificultan la contaminación bacteriana. Consta de las siguientes partes:
Tubo de drenaje. Es un tubo flexible que se encuentra en la parte superior de la bolsa y que está unido herméticamente a ella. Puede disponer de una o dos válvulas unidireccionales (una en la porción del tubo que conecta con la sonda urinaria y la otra en la zona de conexión con la bolsa de drenaje) que dificultan el reflujo de la orina.
Tubo de drenaje de la bolsa. Se halla situado en la parte inferior de la bolsa y también está unido herméticamente a ella. Posee una llave de paso que, al abrirla, permite el vaciado de la bolsa así como la posibilidad de tomar muestras (sistema cerrado).
Respiradero de la bolsa. Es un pequeño orificio por el que entra aire, con el fin de facilitar el vaciado de la bolsa.
Filtro para bacterias. El orificio del respiradero posee un filtro que impide que las bacterias del medio externo penetren en el sistema.
Dispositivo para colgar la bolsa. Se encuentra en su parte superior. Posee dos ganchos a modo de percha que permiten colgar la bolsa del lateral de la cama.
Escala graduada. Permite conocer la cantidad de orina existente en la bolsa en un momento dado.
Materiales necesarios para la postura de sonda vesical:
Antes de llevar a cabo cualquier técnica hay que tener preparado el material que se va a emplear, que en este caso consiste en:
Para la fase de higiene de los genitales:
Guantes desechables.
Cuña.
Gasas.
Toalla.
Esponja.
Dos jarras con agua tibia (una con agua y jabón y otra solo con agua).
Para la fase de sondaje:
Sonda urinaria de calibre, tipo y material adecuados (al menos dos unidades, por si el primer intento de sondaje resulta fallido).
Sistema colector (si el sondaje es temporal o permanente).
Guantes estériles.
Paños de campo estériles.
Lubricante urológico anestésico en unidosis (o si no, sin usar).
Pinzas de Kocher.
Gasas estériles.
Povidona yodada.
Jeringa de 10 ml.
Agua bidestilada
Técnica y procedimiento
Lavado de genitales
Una vez preparado el material, los pasos a seguir son:
Informe a la paciente del procedimiento que va a realizar y disponga las medidas necesarias para asegurar la intimidad.
Lávese las manos y enfúndese los guantes no estériles.
Coloque a la paciente en decúbito supino y pídale que flexione las rodillas apoyándose en los talones. A continuación, pídale que eleve la pelvis y coloque la cuña.
Compruebe que el agua está tibia y vierta un poco a chorro sobre la región genital, de tal manera que discurra en sentido pubis-ano.
Enjabone con una esponja el vello pubiano, la parte externa de los labios mayores y los pliegues inguinales.
Moje unas gasas en agua jabonosa. Separe los labios con la mano no dominante y con la otra realice la limpieza. Siguiendo el sentido pubis-ano, pase una gasa por el pliegue que existe entre los labios mayores y los menores. A continuación, pase otra gasa por la cara interna de los labios menores en sentido dentro-fuera. Finalmente, pase una torunda por el orificio anal y otra por el pliegue interglúteo. Utilice una gasa para cada pasada y deséchela. (Con todas estas medidas se evita la transmisión de microorganismos al meato urinario).
Aclare vertiendo abundante agua a chorro en sentido pubis-ano. Seque las partes internas con gasas (siguiendo los movimientos ya descritos y empleando una gasa para cada pasada) y las externas con una toalla.
Realización de la técnica: Sondaje intermitente en la mujer
Una vez preparado el material y realizada la higiene de los genitales, los pasos a seguir son los siguientes:
Inspeccione los puntos anatómicos de referencia: clítoris, meato urinario y vagina.
Quítese los guantes no estériles y lávese las manos.
Pida que le abran el set estéril, póngase los guantes estériles y cree un campo estéril colocando el paño por encima de la zona pubiana.
Con la mano no dominante separe los labios mayores. Pida que le comiencen a dar gasas impregnadas en povidona yodada. Desinfecte los genitales con su mano dominante siguiendo la dirección del pubis al ano. Desinfecte primero los labios menores y a continuación siga con el meato urinario. Utilice una gasa nueva para cada pasada. (Tenga en cuenta que su mano no dominante ya está contaminada y que su mano dominante ha de permanecer en todo momento estéril. Para conservar la esterilidad es mejor que realice la desinfección ayudándose con las pinzas de Kocher).
Pida que viertan el lubricante en una gasa y que le abran el envoltorio de la sonda. Lubrique la sonda desde la punta hasta una distancia de 2,5 a 5 cm.
Dígale a la paciente que respire lenta y profundamente. (Con esta medida se favorece la relajación del esfínter externo de la uretra).
Separe los labios mayores con la mano no dominante. Con su mano dominante introduzca con suavidad la sonda en el meato urinario hasta que drene la orina en la cuña. (Mantener los labios mayores separados mientras se está introduciendo la sonda evita la contaminación del meato urinario). (Si por error introduce la sonda en la vagina de la paciente, déjela en ese lugar. Coja un nueva sonda estéril e insértela en la uretra. Luego, retire la sonda que está en el lugar equivocado. Así evitará introducir también la segunda sonda en la vagina). (Figura 9)
Retire la mano de los labios mayores y sujete la sonda a unos 2 cm del meato. (Evita la salida accidental de la sonda por una contracción vesical).
Finalizado el drenaje, retire la sonda lentamente hasta su total extracción.
Retire la cuña y, si es necesario, proceda a la higiene y secado de la zona perineal.
Quítese los guantes y lávese las manos.